La Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios alertó sobre el accionar de los fondos buitre, "pero también, y en gran medida, de los `buitres de adentro`", y respaldó el proyecto.

La entidad cuestionó a los sectores nacionales "de intereses fuertemente entrelazados con los centros financieros globales, que abogan por volver a tomar endeudamiento en el exterior e iniciar un nuevo ciclo de valorización financiera".

Apyme consideró que el nuevo canje de deuda permitirá "defender la posición soberana de la Argentina, ante el fallo de la Cámara de Apelaciones de Nueva York a favor de los llamados fondos buitre”.

Los fundamentos de ese fallo "dan voz a intereses especulativos minoritarios", que suman sólo 0,45% del total de bonistas, recordó la entidad.

Ese grupo de acreedores, añadió, "pretende prevalecer por sobre una inmensa mayoría, que adhirió a las reestructuraciones de deuda realizadas en los últimos diez años".

La agrupación de Pymes ratificó luego su apoyo a las políticas orientadas a "revertir la lógica de endeudamiento y ajuste que se había instaurado en la Argentina y en la región, y en virtud de la cual se han venido honrando los compromisos de deuda con recursos surgidos del crecimiento nacional".

La reapertura del canje -sostiene Apyme- posibilitará equiparar a quienes no participaron en los anteriores, con el resto de tenedores de bonos.

Del mismo modo, se reemplazarán los bonos existentes por títulos pagaderos en nuestro país, "a fin de ponerlos a salvo de los embates judiciales en tribunales extranjeros".

Según APYME, la resolución del gobierno nacional "es destacable", para "sostener la viabilidad de un proyecto productivo nacional y avanzar en la recuperación de las herramientas de decisión del Estado, en función del desarrollo inclusivo, con una más justa distribución de la riqueza".

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