El presidente de la Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (APYME), Eduardo Fernández, expresó el rechazo de la entidad hacia el fallo del Juez Griesa de Nueva York, que declara a la Argentina en “desacato” para la justicia de los Estados Unidos.

“Es un ataque inadmisible a la soberanía de nuestro país”, afirmó el presidente de APYME, quien observó que con este fallo “Griesa demuestra una vez más la subordinación de la justicia de los EE.UU. a los intereses del sistema especulativo global”.

“Es un despropósito que el juez Griesa, a pedido de los fondos buitres, fundamente su decisión cargando contra la sanción de Ley de Pago Soberano Local, votada en el Congreso de la Nación para que la Argentina disponer de mecanismos para continuar con el pago regular de las obligaciones”, observó Fernández.

El empresario alertó que esta estrategia de los buitres y Griesa “forma parte de una ofensiva contra el país que busca dar por tierra con la reestructuración de la deuda para volver a someternos una vez más a los dictados neoliberales e instaurar gobiernos conservadores en la región, con las consecuencias nefastas que empresarios nacionales y trabajadores ya conocemos”.

“No es casual que esto ocurra luego del apoyo recibido por la Argentina en la ONU y la histórica decisión del organismo de investigar el accionar de los fondos buitres contra las economías del mundo”, recordó Fernández, quien destacó “la denuncia de nuestra presidenta contra los fondos buitres y la complicidad de los estamentos políticos de los EE.UU. para atacar a un Estado soberano”.

“Apoyamos la postura del gobierno de sostener la soberanía nacional y defender los avances logrados en el manejo de la deuda”, reafirmó el presidente de APYME, quien observó que “sin soberanía nacional no puede haber política de desarrollo inclusivo, industrialización y crecimiento del empleo”.

“El caso de la Argentina está dejando en claro para todo el mundo que hay dos opciones inconciliables: o se capitula ante quienes quieren sostener a toda costa la vigencia de un sistema injusto e irracional, que deja a las naciones a merced de los depredadores, o se impulsa el desarrollo equitativo, con acento en la soberanía, la autonomía, la cooperación y el bienestar de los pueblos”.

Buenos Aires, 30 de septiembre de 2014