"OTRO AIRE PARA NOSOTROS ES VIENTO EN CONTRA"
Recesión: las PyMeS replican a Frigerio
El titular de la APyME, Eduardo Fernández, dijo que en los comercios y pequeñas empresas se ve “la desesperanza del cierre”, mientras las políticas del Estado “no están ayudando”. Advirtió asimismo que el ingreso de productos importados “deteriora la producción nacional”, y eso no solo “destruye el empleo sino que paraliza la economía”.
El presidente de la Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (APyME), Eduardo Fernández, salió al cruce de los recientes dichos del ministro del Interior, Rogelio Frigerio, en torno a que en la Argentina se respira “otro aire”.
“Otro aire para nosotros es viento en contra”, advirtió en declaraciones a Radio La Plata FM 90.9, para luego dar cuenta que “el sector está sufriendo una grave crisis, de la que será muy difícil salir sin apoyo del Gobierno”.
También planteó que en los comercios y las PyMES ya se ve “la desesperanza del cierre”, mientras las políticas del Estado “no están ayudando” porque el ingreso de productos importados “deteriora la producción nacional”, y eso no solo “destruye el empleo sino que paraliza la economía”.
En igual tono, el empresario cordobés sostuvo que las PyMES son un motor de empleo ya que “concentran el 80 por ciento de los trabajadores”, y agregó que por eso “pedimos un apoyo por parte del Gobierno, porque son ellos los que toman estas medidas económicas que nos afectan directamente”.
En referencia a las medidas de apoyo que se intentaron brindar por parte del Gobierno, como la Ley PyME, Fernández manifestó que “hemos reclamado la emergencia en el sector”, pero si no se “da una tarifa segmentada par los servicios, no hay línea de créditos accesibles y no hay mercado interno, es muy difícil subsistir”.
“Esta teoría de que el ingreso de productos manufacturados iba a actuar en favor de la competencia, bajando la inflación, no hizo otra cosa que generar desempleo y baja en el consumo”, prosiguió.
Finalmente, el referente sectorial expresó que la única solución a este conflicto es “defender el mercado interno, proteger el salario y el empleo”, para generar estabilidad y expectativa en la industria.
“Vamos a insistir en que el sector político deje de manosear este tema y se tomen las medidas efectivas”, pero para eso debe existir un “diálogo legítimo” con el Gobierno y que “estén dispuestos a cambiar las reglas”, sentenció
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